Querido diario

Querido diario, cuando apenas abro los ojos pienso "otro día más en el que no tengo ganas de salir de la cama", pero de repente me da sed, o calor, o ganas de ir al baño, y entonces me levanto. Doy vueltas, me siento denuevo en la cama, prendo un cigarrillo antes que comer, usualmente me despierto a la hora del almuerzo, y ni siquiera almuerzo.

Dejo pasar el tiempo,juego con el celular, miro a la nada y pienso, cuántos días más me voy a sentir como si nada tuviera sentido.

Miro a mi alrededor y tengo un montón de cosas que hacer para distraerme, pero nada me llena, nada me entusiasma, nada de lo que antes "amaba" ahora me genera placer.

Vuelvo a mirar el celular, miro si llegó un mensaje suyo, y sonrío, porque en medio de todo este desastre, el es esa luz al final del túnel.