Estaba cocinando y me acordé de las veces que cociné en tu casa, fue como haberme teletrasportado al pasado. Tantas veces me decías que cocinara yo, otras cocibabas vos, otras peleábamos porque ninguno quería hacer nada, otras veces cocibaba mientras esperaba que llegues de trabajar, tengo tantos recuerdos de las veces que te esperé, nunca terminé de encajar muy bien con todo lo que tiene que ver con vos. En general siempre me consideré una persona que no iba a bancarse muchas cosas, pero fuiste muchas veces la excepción.
Reconozco que hubieron momentos en los que no sabía que carajo hacia ahí, con vos, en tu vida, en tu casa, en tus quilombos (aunque según vos me dejabas afuera), sigo sin entender por qué me quedé tanto tiempo, y por qué me sigo acordando de estas cosas, quizás sea porque no todas las veces todo fue tan malo, pero si lo malo pesaba más, y fue ahí que tendría que haberme dado cuenta de que si el amor no pesaba más, tal vez no había amor.